Diferencia entre septicemia y bacteriemia

¿Qué es la bacteriemia?

La bacteriemia es la presencia de bacterias en la sangre. A diferencia de la septicemia, la bacteriemia no siempre es una condición médica grave ni provoca síntomas en la persona afectada. La bacteriemia puede ocurrir como resultado de una pequeña infección, una herida o incluso durante un procedimiento médico. A menudo, la bacteria en la sangre se elimina por sí sola, pero en algunos casos puede requerir tratamiento médico.

Un ejemplo común de bacteriemia sería cuando una persona padece una infección de las encías. Las bacterias presentes en las encías pueden ingresar al torrente sanguíneo, lo que resulta en la bacteriemia. En el caso de una infección dental, la mayoría de las veces, los síntomas son limitados y la situación se resuelve por sí sola.

¿Qué es la septicemia?

La septicemia, también conocida como sepsis, es una condición médica grave que ocurre cuando una infección se extiende por todo el cuerpo y causa una respuesta exagerada del sistema inmunológico. La septicemia es una complicación de la bacteriemia cuando las bacterias han infectado y están dañando los tejidos y órganos del cuerpo. Esta afección puede provocar daño en los vasos sanguíneos, insuficiencia de órganos y, en algunos casos, puede ser mortal.

Un ejemplo común de septicemia sería cuando una persona tiene una infección urinaria sin tratar. Si la infección se propaga por los riñones y a la sangre, esto puede desencadenar una respuesta inflamatoria en todo el cuerpo. Los síntomas de la septicemia incluyen fiebre alta, escalofríos, sudores nocturnos, dificultad para respirar, confusión y fatiga extrema.

Resumen

La diferencia entre la bacteriemia y la septicemia es que la bacteriemia es la presencia de bacterias en la sangre, mientras que la septicemia es la complicación de la bacteriemia cuando las bacterias han comenzado a causar daño en el cuerpo. Es importante buscar atención médica si experimenta síntomas de septicemia, ya que puede ser mortal si no se trata adecuadamente.

Siempre es importante estar atentos a los síntomas de cualquier infección en el cuerpo y buscar atención médica rápida si se sospecha de alguna infección. Saber la diferencia entre la bacteriemia y la septicemia puede ayudar a identificar los síntomas más precisamente y asegurar una atención médica más rápida y eficaz.