Diferencia entre herpes y aftas

Las infecciones en la boca pueden ser un tema delicado, especialmente cuando se trata de identificar la diferencia entre el herpes y las aftas. Aunque ambos pueden parecer similares en apariencia, existen ciertas características que los hacen distintos. En este artículo, aprenderás las diferencias principales entre estas dos afecciones.

Índice
  1. Herpes
  2. Aftas
    1. Ejemplo de la diferencia entre herpes y aftas

Herpes

El herpes es una infección viral que se transmite comúnmente a través del contacto sexual o por contacto directo con una persona infectada. Esta infección puede presentarse en distintas partes del cuerpo, incluyendo los labios, la boca, los genitales y el recto. Los primeros síntomas del herpes aparecen típicamente entre 2 y 20 días después de haber entrado en contacto con el virus.

  • Pequeñas ampollas rojizas o ardientes
  • Suelen aparecer agrupadas
  • Pueden contener una sustancia clara o amarilla
  • Pueden provocar dolor, picor o fiebre

Es importante mencionar que el herpes es contagioso y puede ser transmitido aún cuando no haya síntomas visibles presentes. Las lesiones por herpes tienden a durar de 2 a 4 semanas, pero pueden reaparecer en el futuro.

Aftas

Las aftas, también conocidas como úlceras bucales o llagas en la boca, son lesiones dolorosas que no son contagiosas y que suelen desaparecer por sí solas en una o dos semanas. Son comúnmente más pequeñas en tamaño y menos dolorosas que las ampollas del herpes.

  • Suelen presentarse como manchas blancas o amarillas
  • No son contagiosas
  • Pueden aparecer en la lengua, el interior de las mejillas o los labios
  • Provocan dolor o irritación al comer o hablar
  • Raramente provocan fiebre o malestar general

En general, las aftas son más comunes en personas con defensas bajos o con deficiencias nutricionales. Pueden reaparecer con el tiempo.

Ejemplo de la diferencia entre herpes y aftas

Para diferenciar entre el herpes y las aftas, puedes pensar en estas afecciones de la siguiente manera:

Imagina una pequeña ampolla en los labios que te provoca una sensación ardiente y dolorosa acompañada de fiebre. Podría ser herpes.

Por otro lado, si tienes una pequeña úlcera o mancha blanca en la boca que solo te duele al comer o hablar, entonces es probable que sea un afta.

Si bien tanto el herpes como las aftas pueden ser incómodos y dolorosos, es importante reconocer las diferencias entre estas afecciones para un correcto diagnóstico y tratamiento. Si tienes alguna lesión en la boca que te preocupa, no dudes en consultar con un dentista o profesional médico para obtener una evaluación adecuada.

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