La diferencia entre necesidad y deseo en psicología
En el ámbito de la psicología, es común hablar sobre necesidades y deseos como dos conceptos distintos pero que comparten ciertas características. En este artículo, vamos a profundizar en las diferencias entre ambos términos y cómo pueden influir en nuestra vida diaria.
Necesidades básicas del ser humano
Las necesidades básicas se refieren a aquellas cosas que son fundamentales para la supervivencia y bienestar físico de las personas. Estas incluyen:
- Comida
- Agua
- Refugio
- Sueño
Es importante tener en cuenta que cuando estas necesidades no se satisfacen, pueden generar un gran estrés y malestar emocional. Por ejemplo, si alguien no tiene acceso a suficiente comida, puede sentir hambre y debilidad física. De igual manera, si alguien no consigue un lugar seguro para dormir, puede sentirse inseguro y ansioso.
Deseos en la vida cotidiana
Los deseos, por otro lado, son aquellas cosas que queremos o aspiramos a tener, pero no son esenciales para la supervivencia o el bienestar físico. Algunos ejemplos podrían ser:
- Un trabajo mejor remunerado
- Un coche nuevo
- Un pasatiempo que nos haga felices
A diferencia de las necesidades, los deseos pueden variar mucho entre individuos y pueden cambiar con el tiempo. Es decir, lo que alguien desea hoy, puede ser diferente a lo que deseaba hace unos años. Sin embargo, es importante destacar que aunque los deseos no sean necesarios para la supervivencia, pueden ser muy importantes para la salud mental y emocional de una persona.
¿Qué diferencias hay entre necesidades y deseos?
La necesidad se refiere a algo fundamental para la supervivencia y el bienestar físico de un individuo, mientras que el deseo se refiere a algo que queremos pero que no es esencial. Ambos son importantes, pero es crucial satisfacer las necesidades básicas para una vida saludable y equilibrada.
Un ejemplo para diferenciarlos mejor sería si imaginamos a una persona que ha pasado varios días sin comer. En este caso, la necesidad de comida es esencial para su supervivencia y bienestar físico, lo que la convierte en una necesidad. Por otro lado, si esa misma persona desea tener un coche nuevo, que si bien puede mejorar su calidad de vida, no es esencial para su supervivencia y, por lo tanto, se trata de un deseo.
Aunque las necesidades y los deseos pueden parecer conceptos simples, es importante conocer sus diferencias y cómo pueden influir en nuestra vida diaria. Satisfacer nuestras necesidades básicas es crucial para una vida saludable y equilibrada, mientras que satisfacer nuestros deseos puede mejorar nuestra satisfacción con la vida y reducir el estrés y la ansiedad. Por lo tanto, es importante encontrar un equilibrio adecuado entre ambas categorías para lograr una vida armoniosa y feliz.
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